CAÑETE: EN MEDIO DE TRÁFICO DE TERRENOS, TRATA DE MUJERES Y CORRUPCIÓN, PRETENDEN CELEBRAR EL FESTIVAL DEL HIGO EN CHILCA
* Entre la
fiesta y el caos: Chilca al filo del abismo.
En medio de una creciente ola de
inseguridad, corrupción y el oscuro flagelo de la trata de personas, el
distrito de Chilca, en la provincia de Cañete, se prepara para una celebración
que desata controversia: el Festival del Higo, impulsado por el alcalde Félix
Choquehuanca Quezada.
Desde las primeras horas de la
mañana, el bullicio típico de las calles se mezcla con los rumores sobre las
decisiones de la autoridad edil. Los vecinos comentan con escepticismo:
“¿Fiesta para qué? Primero deberían asegurar nuestra tranquilidad”, reclama
doña Julia, comerciante del mercado, mientras señala la ausencia de seguridad
en la zona.
Y es que los problemas no son
menores. En los últimos meses, Chilca ha sido escenario de una preocupante
expansión de la trata de personas, operada en su mayoría bajo la fachada de
negocios nocturnos. Testigos afirman que menores y jóvenes son reclutadas
engañosamente para trabajos que terminan en explotación sexual.
A esto se suma la inseguridad
ciudadana. Robos a mano armada, extorsiones y pandillas han hecho del distrito
un lugar donde salir a la calle después de las ocho de la noche se convierte en
un acto temerario. “Uno no puede caminar tranquilo ni a comprar el pan”, dice
Carlos, un joven residente que ha sido víctima de asalto en dos ocasiones.
Pero lo que más indigna a la
población es la presunta complicidad de ciertas autoridades en actos de
corrupción. Proyectos inconclusos, sobrevaloración de obras y licitaciones poco
transparentes forman parte de las denuncias que pesan sobre la gestión de Félix
Choquehuanca.
A pesar del panorama sombrío, el
alcalde (Félix Choquehuanca) parece decidido a llevar a cabo el Festival del
Higo, una actividad que, según sus declaraciones, “promoverá el turismo y
reactivará la economía local”. Sin embargo, para muchos ciudadanos, el evento
se percibe como una cortina de humo, un distractor que pretende minimizar la
gravedad de los problemas que asfixian al distrito.
El anuncio del festival ha
generado polarización. Mientras algunos productores ven en la iniciativa una
oportunidad para comercializar su cosecha, otros cuestionan el momento elegido.
“¿De qué sirve celebrar si seguimos viviendo con miedo y bajo la corrupción?”,
se pregunta indignada Rosario, vecina del sector Olof Palme
La tensión es palpable en cada esquina de Chilca. ¿Será el Festival del Higo una chispa de esperanza en medio del caos o solo un intento más por maquillar la decadencia del distrito? Mientras las autoridades reparten invitaciones, el pueblo sigue esperando respuestas reales, anhelando seguridad, justicia y la recuperación de su dignidad. (Radio Kalidad combina con todo)
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