PEDRO CASTILLO: SEIS MESES DE OFERTAS INCUMPLIDAS Y REFORMA EDUCATIVA EN PELIGRO
· * Primer semestre. Natalia González (IEP) insta al
mandatario a respetar las reformas universitarias y de la carrera magisterial.
Samuel Rotta ve un balance negativo en la lucha anticorrupción.
Pedro Castillo está lejos de honrar su palabra de maestro. El mandatario llegó esta semana al primer semestre de su gobierno con un balance negativo, con respecto al avance en el cumplimiento de sus promesas de campaña, situación que se ha visto aún más complicada por las denuncias y sombras que surgieron por su desempeño mismo en el cargo.
Según una revisión realizada por
La República, Pedro Castillo lanzó 42 promesas durante su intervención en los
tres debates que tuvo en la primera vuelta, en su natal Chota, y en el debate
final de segunda vuelta.
De estas 42 ofertas de campaña,
solo ha avanzado en el cumplimiento de cuatro: el inicio de la llamada segunda
reforma agraria; la vacunación masiva, y facilitación del turismo; esto además
de su promesa de respetar la propiedad privada.
Es decir, hay 38 promesas sin
señales de avance en su cumplimiento. El análisis ni siquiera incluye los
planteamientos consignados en el llamado “ideario” que elaboró Vladimir Cerrón
y que fue presentado como plan de gobierno.
La lista de ofertas incumplidas
pasa por distintos sectores. En Salud, Castillo ofreció la implementación de
mil camas UCI y la fusión del sistema de salud. También está la oferta de
incrementar el presupuesto de Salud hasta el 10% del PBI, lo cual tampoco fue
sustentado técnicamente. Lo que sí viene avanzando es la vacunación masiva
contra el Covid-19.
En Economía, Castillo propuso
ampliar el programa Pensión 65, para que accedan las personas a partir de los
60 años. Para la reactivación, propuso la compra de créditos a los
microempresarios desde el Banco de la Nación, para que paguen con menos
intereses.
En el ámbito laboral, habló de
generar un millón de empleos en el primer año y así una lista extensa.
EDUCACIÓN Y CORRUPCIÓN
En opinión de Natalia González,
directora e investigadora principal del Instituto de Estudios Peruanos (IEP),
el primer semestre de este gobierno ha significado un debilitamiento de la
institucionalidad del Ministerio de Educación y una amenaza a la carrera
pública magisterial, situación que perjudicaría especialmente a las zonas
rurales, que es de donde proviene el presidente Pedro Castillo.
La especialista consideró que la
reciente designación de Rosendo Serna como ministro de Educación representa una
esperanza, en relación a cuatro aspectos que la ciudadanía debe defender: la
reforma universitaria, la reforma de la carrera pública magisterial, el nuevo
currículo educativo y el retorno a la presencialidad.
En tanto, en materia de lucha
anticorrupción, el director ejecutivo de Proética, Samuel Rotta, considera que
el balance es negativo en estos seis primeros meses. Ello, según dijo, debido a
la falta de políticas de integridad y transparencia, y también por las
reuniones irregularidades que tuvo Castillo, dando lugar a investigaciones por
presunta corrupción. (La República/Wilber Huacasi)
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